Las velas aromáticas son la mejor opción para ambientar un espacio y que nuestra casa tenga un olor especial. Existen infinidad de velas, con diferentes formas y olores, por lo que además de servir para impregnar tu hogar de un agradable aroma también son un excelente regalo para estas navidades.
¿Quieres sacar el mayor partido a tus velas aromáticas? En 1 ÁGUILA ATLÁNTICA te traemos 5 consejos con los que conseguirás que el olor de tus velas dure mucho más tiempo. ¡Toma nota!
No apagues las velas demasiado pronto
Si quieres conseguir que tus velas duren mucho más tiempo, te aconsejo que la cada vez que las enciendas lo hagas el tiempo suficiente para que la cera se derrita de manera uniforme y no se forme ningún hueco.
Ahora te preguntarás, ¿y esto qué sentido tiene? Pues muy sencillo, te lo explico. Las velas tienen una especie de memoria que hace que se quemen siempre siguiendo un mismo patrón. Debido a esto, si cuando las enciendes no dejas que la capa superior se derrita de manera uniforme la próxima vez que lo hagas la cera seguirá el mismo camino y se derretirá antes por unos sitios que por otros, desperdiciando así gran parte de la vela.
Busca un lugar adecuado
Cuando se prende la llama de una vela, tanto el calor como los vapores ascienden. Por este motivo, si colocamos nuestra vela en un lugar alto su aroma no cubrirá los lugares bajos de la estancia. Lo ideal es poner la vela en un lugar bajo, manteniendo siempre una distancia adecuada con muebles, cortinas o cualquier cosa que se pueda quemar.
Recorta la mecha
Si te fijas, cuando estrenas una vela la longitud de la mecha suele ser de unos 3 o 4 milímetros, ¿verdad?
Pues bien, un truco estupendo para hacer que una vela dure mucho más tiempo, es mantener esta longitud en la mecha de tu vela. Para ello, debemos recortándola cada vez que sea necesario. De esta manera, evitarás que las velas encendidas se consuman de forma acelerada, además de conseguir que no haya un exceso de humo cuando las prendas.
Por otro lado, también es aconsejable cortar la punta quemada de la vela antes de volver a encenderla. Las mechas que no se han recortado y tienen la punta quemada crean manchas de humo negras en las propias velas y en sus recipientes.
Mantén la vela alejada de cualquier corriente de aire
Las corrientes de aire influyen tanto en la forma en que se quema la llama como en el tiempo de combustión. Por tanto, son responsables de las marcas negras que ensucian el vidrio que las contienen y también de que se consuman antes de lo que deberían. Es aconsejable mantenlas alejadas del aire acondicionado, ventiladores o ventanas abiertas.
Apaga la mecha de manera adecuada
Es probable que tu primer instinto cuando se trata de apagar una vela sea soplarle, pero debes saber que este no es el método recomendado.
La manera correcta de apagar una vela es por eliminación de oxígeno. Si la apagamos soplando, la combustión de la mecha continuará por unos instantes, dejando un rastro de humo negro y maloliente que impregnará nuestra estancia.
Siguiendo estos sencillos consejos podrás aprovechar al máximo tus velas y su aroma. Recuerda que es fundamental poner las velas en un sitio seguro, alejadas cualquier cosa que se pueda quemar. Tampoco las dejes al alcance niños u animales.
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